lunes, 31 de diciembre de 2012

Maratón navideño para acabar bien el año.

    Este fin de año ha estado lleno de compromisos fiesteros por fortuna, por lo que no he tenido tiempo de escribir una nueva entrada, y de hecho ya se me pasó la fecha apropiada para este post; pero ahí va de todas formas. 

    Lo normal es que pasen en televisión o que renten en casa las películas típicas de estas fechas, como la enésima adaptación de Un cuento de navidad de Charles Dickens, o por lo menos la película animada del año; pero aquí les va mi muy personal maratón para disfrutar las fiestas decembrinas.


Arma Mortal




    La primera entrega de una de las sagas de acción por excelencia. La recién asignada pareja de sargentos Riggs (Mel Gibson) y Murtaugh (Danny Glover) investigan el aparente suicidio de una joven adinerada en la víspera de Navidad mientras se soportan uno al otro; pronto el caso se complica peligrosamente al descubrir que una banda de narcotraficantes esta tras de ellos.







Batman Regresa 


    Tim Burton tiene serios conflictos con la Navidad, la cual no suele plasmar con una fecha de alegría y unión, sino como una ocasión para que monstruos y marginados salgan de las sombras a hacer de las suyas, y para muestra su segunda y última incursión en el universo de Batman. Ciudad Gótica se ve estremecida por los ataques de una banda criminal conocida como el Circo del triangulo rojo, un misterioso hombre pingüino que emerge de las cloacas como nueva figura heroica, una mujer en un espectacular traje de gato buscando venganza y un millonario sin escrúpulos, quizá el mas peligroso de todos ellos, con ansias de poder; solo Batman puede detenerlos.



Duro de matar



    Que Mi pobre angelito ni que nada, esta es la película navideña por excelencia y la mejor cinta de acción de la historia. ¿O acaso hay algo mas aleccionador sobre el amor y la unión familiar que la historia de un policía que se enfrenta solo a una banda de ladrones/terroristas alemanes para salvar a su esposa encerrados en un rascacielos mientras está descalzo? No lo creo. 

OJO a la escena de la apertura de la boveda, ¡eso es cine en estado puro!





Pilón 1:

Los tres caballeros

    Porque no todo puede ser violencia divertida y sin sentido. En plena Segunda Guerra Mundial y con Europa devastada, EE.UU. buscaba nuevos mercados para afianzar su poder; Walt Disney, como buen patriota, puso su granito de arena mostrando a los siempre bienintencionados yanquis la cultura y el color de los principales lugares del resto de América. El resultado es cuando menos tierno, una maravillosa cinta para recordar viejos tiempos, cuando México ¿era mejor?. Como sea, el Pato Donald esta festejando su cumpleaños y sus amigos José Carioca y Pancho Pistolas se unen a él en un viaje increíble por todo el continente. 



Pilón 2:

    Ya que mencione a Mi pobre angelito


    Un curioso artículo donde analizan las heridas que tendrían los ladrones de Mi pobre angelito en la vida real, spoiler: el palazo que les da el vecino de Kevin al final es lo menos que debería preocuparles.

    ¡Felices fiestas a todos! 

domingo, 25 de noviembre de 2012

Pequeñas grandes joyas


Indie Game: The Movie


    Esperaba encontrarme con un interesante documental sobre videojuegos independientes, termine topándome con un trabajo que me ha tocado en lo más profundo de mis emociones. Indie Game: The Movie es un documental de este 2012 que narra la dura odisea que atraviesan los programadores de juegos independientes para poder ver sus obras realizadas.

    Dirigido por los cineastas canadienses James Swirsky y Lisanne Pajot, quienes grabaron más de 300 horas de entrevistas y videodiarios con Edmund Mcmillen y Tommy Refenes, creadores de Super Meat Boy (uno de los más exitosos juegos independientes de estos años), Phil Fish, desarrollador de Fez y Jonathan Blow, toda una celebridad de Internet y creador de Braid, uno de los juegos más maravillosos que he tenido oportunidad de jugar jamás.





    Es la clase de filme que me gustaría mostrar a mis padres y a todos aquellos que estigmatizan a los videojuegos para que puedan entender de una vez por todas que esto es también una forma de arte, no un pasatiempo que crea psicópatas y holgazanes, no una venganza de Japón hacia Occidente por la bomba Atómica, no un destructor de buenas costumbres; sino el gran entretenimiento de nuestra generación, y para algunas personas, un estilo de vida y la promesa de sueños cumplidos y un futuro mejor.

    Es emocionante seguir a estos 4 individuos en sus experiencias para sacar adelante sus videojuegos, sufrir con ellos cada revés, cada sombra de duda y fracaso de que tantos años de su vida invertidos en ese proyecto no rinda frutos; y también festejar cada buena noticia y cada triunfo como si fuera nuestra. Porque de eso trata el arduo proceso creativo, ya seas pintor, músico, bailarín, cineasta o programador de videojuegos; poner todos tus sueños, todo tu ser en una obra que esta expuesta al escrutinio de todos y que termina siendo un reflejo de ti, porque pones en ella todas tus debilidades y virtudes y se lo ofreces al mundo con la esperanza de lograr una conexión con las personas, que por lo menos alguien logre entender tu mensaje y aprecie tu creación como tú lo haces; eso para mi es arte, y en este documental verán eso, arte.  

    Lo único despreciable de todo es que ni Fez ni Super Meat Boy están disponibles para mi querida PS3 por lo que el documental solo me emociona sobre juegos que no puedo jugar. Eso sí, Braid lo tengo y no me arrepiento de haber gastado $10 dlls en él, es una chulada. 

    El documental fue patrocinado gracias a Kickstarter y actualmente puede ser adquirido legalmente aquí  precio a un precio módico, aunque también ya esta por ahí en los canales habituales; depende de ustedes donde verlo, solo les recalco: ¡ véanlo, vale la pena!  


Indie Game: The Movie Official Trailer from IndieGame: The Movie on Vimeo.

viernes, 9 de noviembre de 2012

El ¿mejor? Bond


Skyfall


    Fui a ver Skyfall, no me gustó. No diré que la película es mala, simplemente que no me gustó, y eso como el fan de James Bond que soy es muy malo, muy muy malo.

    The A.V. Club dice que Skyfall tiene una de las secuencias más trepidantes de toda la saga, yo digo ¡tonterias!: Octupussy tiene una persecución y pelea sobre un tren más emocionante que lo visto en esta.
Casino Royale me fascina, Quantum of Solace no me parece la mierda que muchos dicen, pero con Skyfall llegue a un punto donde estoy harto de que me quieran diseccionar al extremo a James Bond. Primero, porque no es original: a lo largo de toda la saga hemos tenido oportunidad de ver la faceta más humana del personaje de Ian Flemming, siendo curiosamente su punto más devastador la siempre menospreciada Al servicio secreto de su majestad; segundo: porque a estas alturas no quiero ver los problemas emocionales de James Bond, quiero verlo pateando traseros.

    Es chistoso como los productores y el mismo público reniega de la etapa Brosnan o de la etapa Dalton, y se apresuran a decir que Craig (que me encanta en rol, todo sea dicho) es el mejor Bond, cuando Skyfall se dedica a meter elementos clásicos Bond, pero haciéndolo tibiamente en lugar de hacerlo con aplomo, usando tramas y desarrollo de personajes que ya hemos visto por ejemplo en GoldenEye y El mundo no basta, o que Timothy Dalton ya tenía esa crudeza y fiereza por la cual fue repudiado y que ahora ha encumbrado a Daniel Craig (en serio gente, vean de nuevo Licencia para matar, de las mejores de la saga).

    Javier Bardem y su Silva me parece una versión descafeinada de Alec Trevelyan con los toques obligados del Guasón de Heath Ledger (de verdad público y productores de Hollywood, estoy hasta la madre del Guasón de Heath Ledger, ya supérenlo) aunque debo resaltar el momento de su primer encuentro con Bond, acoso sexual incluido, una gran escena. Sin embargo y a pesar de la amenaza que nos dicen que es, el villano se va diluyendo más y más, incluso y a pesar del constante desprecio hacia la formula que tienen algunos, aquí Bardem cae en el cliché más viejo del libro: puedes matar a Bond ¡MATALO, no te quedes hablando con él!

    Duele ver la forma en que desaprovechan a Berenice Marlohe, no solo es un portento de mujer, si no que en pocos minutos logran dar matices a su personaje que lo hacen interesante, todo para que salga de la trama de una forma tan simplona. Ya en la saga ha habido chicas Bond con poca participación, pero en otras ocasiones lo han resuelto de maneras más logradas. Tari Hatcher muere en El mañana nunca muere a mitad de la película, aun así la escena donde Bond la encuentra muerta es devastadora y muy efectiva; incluso en Quantum Gemma Arterton tiene un destino similar y aun así logra tener su momento de gloria e incluso Bond se asegura de obtener revancha por ella. Aquí Marlohe tiene una presentación interesante y un trasfondo trágico, pero al final la usan como a esas chicas Bond que solo servían para llevar a Bond de punto A al punto B (y acostarse con él, claro)  para después ser desechadas, la cuestión es que a esas chicas no se molestaban si quiera en darles matices, simplemente eran floreros. Toda una oportunidad desperdiciada.

    Judi Dench esta fantástica como siempre, pero también debo decirlo, su desarrollo en esta película está muy gris; ella y Brosnan tenían más química en una sola escena de GoldenEye que la que ha tenido con Daniel Craig en tres películas. Y una vez más, no es algo que no hayamos visto antes en la etapa Brosnan.

    Aun así tiene aspectos que me gustaron, la fotografía del filme es de una calidad soberbia, las escenas en China son hipnóticas y la iluminación en el clímax (a pesar de lo aburrido que me pareció) son como para construirle un monumento al fotógrafo; Ralph Fiennes, Ben Wishaw y Naomi Harris están estupendos en sus roles, te tienen en su bolsillo desde sus primeras escenas y hacen que vayas con ellos a muerte, y tomando en cuenta lo vital que serán para el futuro de la saga, no podría estar más agradecido.

    Finalmente quiero señalar que muchos han dicho que hay una clara influencia de The Dark Knight en Skyfall, incluso el director Sam Mendez lo dijo públicamente, especialmente cuando la trama se mueve a Escocia en su recta final; sin embargo  en todo ese clímax no era Batman en lo que pensaba, sino en Hard Target de John Woo  y Van Damme: la escena con Bond, M y el guardabosques es casi calcada de la escena de Boudreaux, Natasha y el tio Douvee en la cabaña; es cierto, revísenlo. Eso antes de que se pusieran en modo Macaulay Culkin.  

    Tres películas después en la era Craig, la sensación es que todo es prologo, que todo es un preámbulo a la gran aventura de Bond; todo está listo para numero 24,  ya sin traumas, sin psicoanálisis, ya todas las piezas y personajes en su lugar, de una vez y por todas, es hora de que Bond patee traseros como nadie más lo sabe hacer.    


domingo, 28 de octubre de 2012

La más valiosa de las festividades



    Este próximo fin de semana se nos viene puente, y no cualquier puente, sino mi puente favorito: el de Día de muertos y Todos los santos. La adoro por la comida: las galletas, los tamales, los atoles, los dulces; es además una fecha que me emociona y que a diferencia de otras fechas del calendario tiene un verdadero significado.

    Nunca me he considerado un hombre devoto, por lo que las festividades religiosas nunca me han emocionado especialmente; claro, disfruto la Navidad como cualquier otro, la convivencia familiar, lo regalos, las luces y demás trivialidades; pero jamás me la he tomado en serio. ¿Cómo se hace eso?, ¿festejas a ese monstruo de la mercadotecnia llamado Santa Claus o celebras el nacimiento de un profeta el cual ni siquiera ocurrió en ese mes? Eso si realmente pasó. Y lo mismo me pasa en semana santa.

    Por otro lado si soy un apasionado de la Historia, por lo que veo las efemérides históricas desde otro punto de vista: eventos muy lejanos como para que me afecten emocionalmente, eventos tergiversados con el paso del tiempo o eventos con un valor histórico dudoso. ¿Cómo celebrar la Independencia si no somos ni remotamente independientes en ningún sentido? ¿Cómo celebrar ese juego de tronos llamado Revolución Mexicana que nos legó 70 años de un régimen  y el culto a figuras ambas igual de cuestionables?

    Quizá pueda ser una persona cínica o egoísta, pero me es difícil conectarme a un nivel emocional con la vida, obra y muerte de personas que vivieron hace 200 años o mas, que incluso puede que nunca hayan existido.  O celebrar simplemente porque los gobiernos o las empresas me dicen que debo hacerlo. Después de todo, a los que llamamos héroes, no eran hombres tan impolutos, y a los que llamamos villanos también tenían actos que podrían redimirlos un poco ante la historia.

    Y tenemos un día para todo y para todos, para cada miembro de la familia y para cada profesión habida y por haber. Qué bueno ver a una persona queriendo rendir homenaje a sus seres queridos y a otra persona sacando ganancias de ello, pero como dijo Syndrome: “cuando todos sean super's, nadie lo será” y es que se van creando con tanta frecuencia estas fiestas que ya es difícil tomárselas con importancia.

    Pero hablaba de que puedo sonar cínico, y es que el Día de muertos es una celebración profundamente religiosa (y no solo me refiero al catolicismo, todas las culturas y religiones del mundo que han existido tienen rituales hacia sus difuntos) y bastante comercial que representa una importante derrama económica, ya sea que lo practiques o que prefieras el Hallowen (una festividad que tiene en sus orígenes más similitudes con Día de muertos de lo que la gente cree, pero que ha mutado en esa deforme máquina de hacer dinero que nos llega de E.U.). Además de que no negaré lo divertido que es el pretexto de juntarse con la familia y/o los amigos para armar la fiesta en cualquiera de estos puentes.


    Sin embargo, en su núcleo, el Día de muertos se trata de festejar la vida y honrar la memoria de seres a los que si conocí, que si tuvieron impacto en mi vida, con los cuales conviví y a los cuales amé, ya sea que sigan en espíritu con nosotros o que no sean más que polvo en la tierra. Y a final de cuentas es una fecha que habla de un tema universal, porque mas allá de creencias, de guerras, descubrimientos, inventos, o personajes; lo único certero en esta vida y en este mundo, es que todos moriremos.

    Y eso, por más siniestro que suene, es más real y digno de honrar para mí que cualquier 16 de septiembre, San Valentín, Santos Reyes, 5 de mayo, o cualquier día del calendario que se les pueda ocurrir. Así que les deseo a todos un feliz Día de muertos, que se la pasen muy bien y que coman muy rico, yo ya tengo una caja de galletas caseras directas del rancho esperándome. Nos leemos la próxima.   

domingo, 30 de septiembre de 2012

Viejas glorias musicales de los bits


La música de la saga The King of Fighters


    En los 90’s los salones Arcade, o como los conocimos todos nosotros: “maquinitas”, eran los reyes del barrio. Cualquier tienda o mini-super que tuviera una “maquinita” en su establecimiento, se ganaba una legión fiel de niños y jóvenes perdidos que acudían religiosamente a gastarse su dinero o el de sus padres en aquellos cacharros.

    Y nada era más representativo del Arcade que los juegos de pelea, cuando la valía y talento de un hombre se media a base de Hadouken’s y combos. Y dentro del género de peleas, no hubo nada más emblemático que la rivalidad entre las compañías de videojuegos Capcom y SNK; que se disputaban el título de la reina de los arcades.

    Capcom había revolucionado la industria y puesto de moda las luchas con su legendario Street Fighter 2, además de crear otra sagas clásicas como Darkstalkers y X-men: children of the atom; por otro lado, SNK tenía buenos éxitos con sus series Fatal Fury y Art of Fighting, pero nada que pudiera mirar de tú a tú a los peleadores callejeros de Capcom. Entonces llegó el año 1994.

    En una jugada maestra, SNK decidió combinar sus más importantes sagas en una sola historia para crear el juego definitivo, y en cierta forma lo lograron. Así nació The King of Fighters 94 (KOF 94), dando inicio a unos gloriosos 6 años en el que ambas compañías se esmeraban en sacar juego tras juego, uno mejor que el anterior, con tal de ganar el favor de los jugadores.

    Ahora, ¿Qué saga es mejor Street Figther o The King of Fighters?  Eso se los dejo a su opinión, pero esta entrada les dará un punto a favor de la saga de SNK, porque si hay algo en que los KOF superaron ampliamente a sus rivales fue en el apartado sonoro.

    Como dije, las ambiciones de SNK eran enormes y no anduvieron con medias tintas, pusieron a sus mejores elementos a diseñar el juego. Los encargados de crear la música fue la Neo Sound Orchestra, quienes colaboraron con SNK durante toda la vida de la compañía hasta su bancarrota en 2001.

    Pero durante sus años felices la NSO creó melodías para cada entrega de KOF con una calidad apabullante que trascendían el formato para transmitir verdaderas experiencias, cualquiera que le haya costado sudor y sangre vencer a Rugal estará de acuerdo conmigo que escuchar su tema hace que se ponga la piel chinita.

    En estos benditos tiempos modernos se puede encontrar la música de KOF fácilmente en Youtube, de hecho el usuario Rick00005 se ha encargado de postear en su totalidad, todos los temas de todos los KOF’s hasta ahora; chéquenlo, vale la pena.


    Ahora una humilde selección con mis temas favoritos:


Slum No. 5 (USA sport team theme)
Tema del equipo de Heavy D, Lucky Glauber y Brian Batler en KOF 94.




Getsutou R&D (Rugal Bernstein 1 Theme)
Primer tema del jefe del KOF 94, Rugal Bernstein.




Ketsutou R&D (Rugal Bernstein 2 Theme)
Una vez que vencías a Rugal, este se levantaba y decía que ahora lucharía con todas sus fuerzas, y entonces la pesadilla de Kaiser Wave – Repuken – Genocide Cutter  comenzaba.




Arashi no Saxophone (Rival Team Theme)
Tema del equipo de Eiji Kisaragi, Billy Kane y el favorito de mucho Iori Yagami en KOF 95.




Omega Rugal Theme
Jefe final del KOF 95, Rugal volvía aumentado y mejorado.




Esaka (Japan Team Theme)
Tema del equipo de Kyo Kusanagi, Goro Daimon y Benimaru Nikkaido en KOF 96.





Ikari Warriors Team Theme
Tema del equipo de Clark, Leona y Ralf en KOF 96.





El Boss Team del KOF 96 era bastante genial, al ser KOF en principio un crossover de Fatal Fury y Art of Fighting, era cuestión de tiempo que los meros malos malísimos de aquellos juegos aparecieran juntos; y claro cada uno tenía su propio tema, porque son demasiado chingones como para compartir música.


Geese ni Katakori (Geese Howard Theme)
Tema de Geese, jefe del Fatal Fury y líder del Boss Team.




Requiem Nitanchou K.626 Dies Irae (Wolfgang Krauser Theme)
Tema de Krauser, otro jefe del Fatal Fury. Este tema no es original, sino un tema de Mozart; aun así escuchar esto en un juego de peleas es inusual y fantástico.




Dust Man (Mr. Big Theme)
Tema de Mr. Big (no el de Sex and the City) jefe y proxeneta del Art of Fighting.




Trash Head (Goenitz Theme)
Tema del jefe final de KOF 96 y mi personaje favorito: Leopold Geonitz. Hasta la fecha sigo teniendo pesadillas con el Dodo desu ka.




También vale la pena escuchar la versión de CD (Arrenged) de este tema:




Psycho Soldiers Remix'97 (Athena Asamiya Theme)
Tema individual de Atena en KOF 97.




Rythmic Hallucination (Orochi New Face Theme / Yashiro Orochi Theme)
Tema del equipo Chris, Shermie y Yashiro, sub-jefes del KOF 97. Mi tema favorito, si esto no es “Badass” entonces no sé que es.



Bueno niños y niñas, ahí le dejo por ahora; nos leemos después.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Cuando los “cortos” gustaban



Leyendo una noticia el otro día con mis amigos de Las Horas Perdidas  me puse a pensar en lo nefastos que se han vuelto los cortos o “trailers” de las películas desde hace años. La falta de originalidad no solo afecta a las historias sino a la forma de vender las historias. Frases como “This Summer” “Next Year”, edición frenética con música molona y corte repentino al chiste mamón de la cinta. Todo narrado por la misma voz, en ingles o en español.




Uno de los últimos cortos que recuerdo haber disfrutado es el de Star Trek de 2009  pero vamos, ya estamos bastante alejados de joyas como esta:


miércoles, 29 de agosto de 2012

Bienvenido a Rapture


Bioshock


    La presente generación de videojuegos (2005-actualidad) se ha caracterizado por el dominio de los juegos de disparos en primera persona o First Person Shooter  (FPS). Series como Call of Duty ó Halo son las reinas absolutas de ventas en las tiendas. Todo esto estaría de lujo para mí de no ser por un pequeño problemita: ¡DETESTO LOS FPS!

    Simplemente no los tolero, me parecen confusos, difíciles de manejar, difíciles de ubicarte en el espacio, difícil de moverte, difícil de todo; pero sobre todo me parecen repetitivos.  Prácticamente todos se pueden dividir en tres categorías: Segunda Guerra Mundial, unidades antiterroristas e invasiones alienígenas. Pero en 2007 apareció un juego que, como su premisa, llegaba como un faro en la oscuridad en el interminable océano de la monotonía: Bioshock.




    La trama es cautivadora: viajas en un vuelo camino a Londres a visitar a tus familiares, de pronto  el avión sufre un accidente y cae en medio del océano Atlántico, siendo tú el único sobreviviente;  solo en el mar rodeado de los escombros del avión, alcanzas a vislumbrar un faro al cual entras buscando refugio, solo para encontrar una batisfera que te lleva a un lugar como nunca habías presenciado: una ciudad construida en el fondo del mar, una ciudad llamada Rapture.

    Pero ¿quién construyo esa ciudad? ¿Con que propósito? ¿Por qué solo hay cadáveres y destrucción? ¿Realmente fue un accidente lo que te hizo llegar aquí? Todas esas respuestas las encontraras si te atreves a adentrarte en el impactante mundo de Rapture.

    Desarrollado por Irrational Games y 2K Games, debutó en exclusiva temporal para el Xbox 360, un año después llegaría a mi querida PS3. Ya para entonces Bioshock había recibido todas las alabanzas habidas y por haber de los principales medios dedicados al ocio virtual  y declarado juego del año por otros tantos.

    Y razón no les falta, lo que Bioshock lograba era lo que muy pocos FPS pueden hacer: hacerte sentir  el juego. Recorrer los oscuros caminos de Rapture es toda una experiencia; atestiguar el auge y caída de esa utopía construida para huir de las ataduras morales de los gobiernos y la religión, para que el artista y el científico no estuvieran limitados por la censura, y que cada hombre recibiera la recompensa por su propio trabajo.  




    Todo esto mediante mensajes de audio dejado por los habitantes de la ciudad que nos irán desvelando los pormenores de lo que ahí sucedió mientras avanzamos por la historia que se desarrolla ante nosotros. Una manera muy buena de ponernos en contexto sin desviarnos del camino, además de contribuir a la atmosfera terrorífica y decadente que impera en la ciudad devastada por la cruenta guerra civil que ahí aconteció.

    La historia del juego está fuertemente inspirada en la filosofía Objetivista de la autora Ayn Rand, empezando por uno de sus protagonistas, Andrew Ryan (referencia directa a Ayn Rand), el fundador de Rapture; quien arto del mundo occidental, decide construir una ciudad en el fondo del mar, ya que considera que es el único lugar donde puede florecer una sociedad gobernada por el libre mercado y el objetivismo, lejos del alcance e influencia del exterior.



    El diseño del juego es sobrecogedor. Toda Rapture está construida con un estilo Art Deco, haciéndola una gigantesca capsula del tiempo. No hay un solo rincón de la ciudad que no sea impresionante, llena de decoraciones, aparatos, muebles y publicidad de los años 50’s; rematado por un diseño sonoro en el que la música de la época y los mensajes publicitarios que suena en los distintos escenarios, se mezcla con los gritos agónicos y los pasos amenazantes de las criaturas que aguardan en la oscuridad.

    Y es que no hay nada más perturbador  que escuchar una melodía suave y alegre mientras un mutante se lanza hacia a ti para hacerte pedazos.





    Dos años después fue lanzada una secuela desarrollada por el mismo estudio pero no el mismo equipo creativo, titulada como no: Bioshock 2, que aunque buena, no lo era tanto como su predecesora, ya que solo ampliaba y repetía lo ya visto sin innovar demasiado; aun así no tiene desperdicio. Y muy pronto en unos meses llegara al mercado una nueva entrega de la saga, en esta ocasión desarrollada por el mismo equipo del juego original, llamada: Bioshock Infinite. Que aunque comparte el nombre, no tendrá mucho que ver con Rapture.





    Ha habido muchos juegos buenos en esta generación que esta próxima a terminar, varios de ellos por suerte exclusivos de PS3, claro que las otras consolas han tenido sus grandes exclusivas; pero pocos juegos han sido tan impactantes como lo fue Bioshock, por lo que no puedo hacer más que recomendar ampliamente que experimenten esta joya. 

sábado, 28 de julio de 2012

La Leyenda del Caballero de la Noche


El Caballero de la Noche Asciende


    Hacer una tercera parte debe ser lo más complicado del mundo. Haces una película, buscas una buena historia, buenos personajes, quizá tengas mucho presupuesto quizá no, básicamente haces lo que puedes. Pero entonces a la gente le gusta y le gusta mucho, y entonces se abre la oportunidad de hacer una continuación de tu trabajo. Pero ya tienes experiencia, ya sabes lo que funciona y lo que no, ya tienes un precedente; así que simplemente perfeccionas tu trabajo.

    Y entonces les revientas los cerebros a todos, tu continuación se vuelve un fenómeno, un éxito, en algunos casos quizá una obra maestra, pasas a ser el nuevo Rey Midas. Pero entonces llega el problema de que la gente quiere más, el estudio quiere mas ¡y maldita sea tienes que darles más!

    Pero puedes sorprender a alguien una vez y hasta dos, pero a la tercera ya te tendrán la medida; y además ahora todos esperan de ti poco menos que el equivalente a la segunda venida de Cristo y cualquier resultado menor a eso será caca seca para ellos.

    ¿Entonces qué haces? Puedes hacer lo mismo o puedes optar por un camino opuesto, de cualquier forma te arriesgas al rechazo, porque lo que todo el mundo quiere de una secuela es ver la misma película pero diferente. Así de fácil y así de difícil.

    Y aun en el supuesto de que logres un resultado decente, no puedes evitar el problema de que tienes un producto que depende altamente de otras dos cintas con las que puede haber una diferencia de 6, 8 ó hasta 10 años y que difícilmente pueda sostenerse por sí misma sin tener que confiar en la buena memoria del público.


    Eso hablando de trilogías normales, ahora traten de pensar en sagas de superhéroes que hayan llegado a una tercera entrega…ahora traten de pensar cuales de ellas eran realmente buenas películas (piensen en Superman 3, Batman Eternamente, Darkman 3, El Cuervo 3, Blade Trinity, X-Men la batalla final, Spiderman 3).

    El camino más común es volver al principio, en muchas trilogías fílmicas, la tercera parte suele ser en esencia una versión potenciada de la primera parte o por lo menos se trata de cerrar un viaje, tramas e historias que irremediablemente vuelven a donde todo empezó. Una conclusión.

    Porque eso es lo que The Dark Knight Rises es, una conclusión. Y así es que como mejor funciona. Vista individualmente podrá parecer floja, comparándola con la anterior solo provocara un debate absurdo de cual es mejor. El gran merito de esta cinta es que ahora podemos hablar de una “saga de Batman”. Dentro de un par de años cuando la pasen por televisión junto a sus dos hermanas, y podamos disfrutar de un tirón como enanos,  entenderemos la magnitud de lo que ha logrado Christopher Nolan y todo su equipo.

    Al Batman de Nolan le aguarda un lugar especial junto a grandes trilogías como Star Wars (aunque nunca he sido fan la verdad), Volver al Futuro, El padrino, El Señor de los Anillos, etc. Curiosamente en esas sagas, la segunda parte es considerada siempre la mejor, mientras la tercera suele generar acalorados debates, pero al igual que con Batman, esas terceras partes no están para competir, están para cerrar ciclos y poner un broche de oro a historias increíbles.

    La música y el diseño de producción siempre han sido mis quejas en esta saga, de lo segundo ya ni me esfuerzo, estamos directamente en Nueva York, no en Gótica, pero con semejante montaña rusa eso ya es lo de menos. Lo que sí me ha sorprendido gratamente es el score; en esta ocasión Hans Zimmer firma en solitario después de compartir labores con James Newton Howard en las pasadas entregas. Y no podía ser mejor, por primera vez la música se vuelve un elemento clave que define personajes y situaciones; sigue sin llegarle al nivel a Danny Elfman pero es lo que hay.


    Pero el pilar de la cinta está en las increíbles interpretaciones. Si en la anterior Gary Oldman había hecho suyo el show del lado de los buenos, en esta ocasión deja un poco el protagonismo, al igual que Morgan Freeman y Michael Caine; todos están ahí haciendo su labor a la perfección apareciendo cuando más se les necesita, pero ya no como estelares, sino como trampolines para sus protegidos.

    Porque ahí están Joseph Gordon Levit como el policía John Blake tomando el relevo de los chicos buenos, Anne Hathaway que a pesar de las dudas termina sorprendiendo como Gatúbela, entregando una Femme Fatale de lujo, astuta, peligrosa y muy, muy sexy (acá entre nos nunca he sido muy fan de la Hathaway pero aquí la prefiero mil veces antes que Scarlet Johannson y su Viuda Negra, simplemente gana por goleada).

    Y luego esta Tom Hardy, una autentica bestia parda. El actor construye en Bane un villano Brutal, despiadado, calculador, manipulador e imponente. ¿Las quejas sobre su voz? Infundadas. La voz de Bane es intimidante, a veces aterradora; y Hardy se divierte mezclando un tono socarrón como de villano Bond y amenazante como Darth Vader.

    También están Mathew Modine como el detective Foley que intenta tener una aportación dramática y que termina siendo francamente prescindible; y Marion Cotillard como Miranda Tate, nueva dirigente de empresas Wayne e interés amoroso de Bruce Wayne. Su personaje pasa de navegar en segundo plano durante casi toda la película hasta tener un protagonismo absoluto. Pero ese es el problema, porque tarda tanto para entrar en el gran juego que cuando lo hace, literalmente no tiene tiempo para volverse memorable.

    Finalmente, por sobre todo lo demás y gracias a los dioses, esta Christian Bale. Por fin, el actor toma el papel protagónico como nunca antes, después de todo esta es su película, todo empieza y termina con él, como debe ser, forjando la leyenda de Batman. Por cierto esta vez se moderó con la voz aguardientosa y es genial.

    La película tiene sorpresas, varias y muy buenas que harán las delicias de los fans (al menos de algunos, ya saben que nunca van a estar todos contentos), además Christopher Nolan y David Goyer, a pesar de crear un mundo de Batman realista, han sabido inspirarse de historias de Batman como pocos lo han logrado, y la cinta está llena de referencias, homenajes o detalles (como quieran llamarle) a sagas como Cataclismo, No man’s land, La Caída del Murciélago (desde luego), y hasta de la emblemática The Dark Night Returns.

    No todo es miel sobre hojuelas, ya comenté lo difícil que es para esta cinta mantenerse por sí misma porque depende demasiado de nuestro conocimiento previo; además, al igual que sus predecesoras, la historia está llena de huecos y trampas, con los personajes sacándose  información de la manga para hacer avanzar la trama y mantener al publico informado; pero lo hacen de forma tan directa y descarada, que aunque pueda haber una explicación lógica para que sepan lo que saben, acaba pareciendo que los diálogos vienen de ningún lugar.

    Nolan ha construido villanos fascinantes, ¡pero como le falla el darles finales espectaculares!, darle esa salida por la puerta grande que todo gran villano necesita. Algo como esto, ó esto.




Ultimas consideraciones:

-No faltaran las discusiones entre fans que digan “eso es Batman” o “ese no es Batman”. Yo mismo he caído en eso, en la anterior al ver la escena del interrogatorio o aquella donde Batman entra a un club a punta de madrazos para interrogar a un mafioso, recuerdo haber exclamado: “¡ese no es Batman!”. Al final de cuentas me parece inútil, con un personaje tan antiguo y con tantas adaptaciones, cambios y reinicios en sus historietas ya no creo que exista un “Batman definitivo”, solo las diferentes visiones que de él tengan los distintos autores.

-¿En qué momento Alfred se volvió una enciclopedia de Bane? Todos hablan de Bane como si su agenda fuera de dominio público. Tal vez si pensamos en Bane como un Chapo Guzmán o un Osama igual tenga sentido, aun así ¿de donde rayos se entera Alfred de todo lo que sabe de Bane?

-Y hablando de incoherencias aquí una con tremendo SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER  ¿Cómo se entera John Blake que Bruce es Batman? Me parecía que Gordon lo sabía y se lo daba a entender a Blake después de que este lo saca de las alcantarillas, pero después Gordon se sorprende al enterarse al final. O sea no entendí.

(ACTUALIZACIÓN: Blake le explica a Bruce que cuando lo conoció en el orfanato, después de tanto idealizarlo como "el huérfano millonario", observó en él ese semblante que solo alguien que ha perdido a su familia puede tener, alguien como el propio Blake. A partir de ahí, Blake reconoció lo mismo en Batman por lo que hizo la asociación. Después de eso, fue cuestión de tocar la puerta en el momento justo y confirmar sospechas. Como dije arriba, puede tener lógica, pero la forma en la que lo presentan lo hace confuso)         FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER.

-La primera pelea entre Batman y Bane es cruda y salvaje, todo un choque de titanes. Su segundo y definitivo encuentro… ehhh, pudo ser mejor.

-Es como las secuencias de acción que filma Nolan, son espectaculares pero no dejan de sentirse algo “frías” y “mecánicas”.

-¿Cuál es la mejor de las tres? ¿esta supera a la segunda? Mmmm no lo sé, de entrada debo verla de nuevo urgentemente, además creo que el único juez justo es el tiempo y como dije: con los años el verdadero placer será echarse un maratón viendo las tres una tarde de sábado.

-Lo que al final hace Batman... creo que muy pocos autores, sino es que ninguno, se han atrevido hacer eso en toda la historia del personaje. Me encantó, y yo lo haria también.