El Caballero de la Noche Asciende
Hacer una tercera parte debe ser lo más complicado del mundo.
Haces una película, buscas una buena historia, buenos personajes, quizá tengas
mucho presupuesto quizá no, básicamente haces lo que puedes. Pero entonces a la
gente le gusta y le gusta mucho, y entonces se abre la oportunidad de hacer una
continuación de tu trabajo. Pero ya tienes experiencia, ya sabes lo que
funciona y lo que no, ya tienes un precedente; así que simplemente perfeccionas
tu trabajo.
Y entonces les revientas los cerebros a todos, tu continuación
se vuelve un fenómeno, un éxito, en algunos casos quizá una obra maestra, pasas
a ser el nuevo Rey Midas. Pero entonces llega el problema de que la gente
quiere más, el estudio quiere mas ¡y maldita sea tienes que darles más!
Pero puedes
sorprender a alguien una vez y hasta dos, pero a la tercera ya te tendrán la
medida; y además ahora todos esperan de ti poco menos que el equivalente a la
segunda venida de Cristo y cualquier resultado menor a eso será caca seca para
ellos.
¿Entonces qué haces? Puedes hacer lo mismo o puedes optar
por un camino opuesto, de cualquier forma te arriesgas al rechazo, porque lo
que todo el mundo quiere de una secuela es ver la misma película pero
diferente. Así de fácil y así de difícil.
Y aun en el supuesto de que logres un resultado decente, no
puedes evitar el problema de que tienes un producto que depende altamente de
otras dos cintas con las que puede haber una diferencia de 6, 8 ó hasta 10 años
y que difícilmente pueda sostenerse por sí misma sin tener que confiar en la
buena memoria del público.
Eso hablando de trilogías normales, ahora traten de pensar
en sagas de superhéroes que hayan llegado a una tercera entrega…ahora traten de
pensar cuales de ellas eran realmente buenas películas (piensen en Superman 3, Batman Eternamente, Darkman 3, El Cuervo 3, Blade Trinity, X-Men la
batalla final, Spiderman 3).
El camino más común es volver al principio, en muchas trilogías
fílmicas, la tercera parte suele ser en esencia una versión potenciada de la
primera parte o por lo menos se trata de cerrar un viaje, tramas e historias
que irremediablemente vuelven a donde todo empezó. Una conclusión.
Porque eso es lo que The Dark Knight Rises es, una conclusión.
Y así es que como mejor funciona. Vista individualmente podrá parecer floja, comparándola
con la anterior solo provocara un debate absurdo de cual es mejor. El gran
merito de esta cinta es que ahora podemos hablar de una “saga de Batman”.
Dentro de un par de años cuando la pasen por televisión junto a sus dos
hermanas, y podamos disfrutar de un tirón como enanos, entenderemos la magnitud de lo que ha logrado
Christopher Nolan y todo su equipo.
Al Batman de Nolan le aguarda un lugar especial junto a
grandes trilogías como Star Wars (aunque nunca he sido fan la verdad), Volver
al Futuro, El padrino, El Señor de los Anillos, etc. Curiosamente en esas sagas, la
segunda parte es considerada siempre la mejor, mientras la tercera suele
generar acalorados debates, pero al igual que con Batman, esas terceras partes
no están para competir, están para cerrar ciclos y poner un broche de oro a
historias increíbles.
La música y el diseño de producción siempre han sido mis
quejas en esta saga, de lo segundo ya ni me esfuerzo, estamos directamente en
Nueva York, no en Gótica, pero con semejante montaña rusa eso ya es lo de
menos. Lo que sí me ha sorprendido gratamente es el score; en esta ocasión Hans
Zimmer firma en solitario después de compartir labores con James Newton Howard
en las pasadas entregas. Y no podía ser mejor, por primera vez la música se
vuelve un elemento clave que define personajes y situaciones; sigue sin
llegarle al nivel a Danny Elfman pero es lo que hay.
Pero el pilar de la cinta está en las increíbles interpretaciones.
Si en la anterior Gary Oldman había hecho suyo el show del lado de los buenos,
en esta ocasión deja un poco el protagonismo, al igual que Morgan Freeman y
Michael Caine; todos están ahí haciendo su labor a la perfección apareciendo
cuando más se les necesita, pero ya no como estelares, sino como trampolines
para sus protegidos.
Porque ahí están Joseph Gordon Levit como el policía John
Blake tomando el relevo de los chicos buenos, Anne Hathaway que a pesar de las
dudas termina sorprendiendo como Gatúbela, entregando una Femme Fatale de lujo,
astuta, peligrosa y muy, muy sexy (acá entre nos nunca he sido muy fan de la
Hathaway pero aquí la prefiero mil veces antes que Scarlet Johannson y su Viuda
Negra, simplemente gana por goleada).
Y luego esta Tom Hardy, una autentica bestia parda. El actor
construye en Bane un villano Brutal, despiadado, calculador, manipulador e
imponente. ¿Las quejas sobre su voz? Infundadas. La voz de Bane es intimidante,
a veces aterradora; y Hardy se divierte mezclando un tono socarrón como de
villano Bond y amenazante como Darth Vader.
También están Mathew Modine como el detective Foley que
intenta tener una aportación dramática y que termina siendo francamente
prescindible; y Marion Cotillard como Miranda Tate, nueva dirigente de empresas
Wayne e interés amoroso de Bruce Wayne. Su personaje pasa de navegar en segundo
plano durante casi toda la película hasta tener un protagonismo absoluto. Pero ese
es el problema, porque tarda tanto para entrar en el gran juego que cuando lo hace,
literalmente no tiene tiempo para volverse memorable.
Finalmente, por sobre todo lo demás y gracias a los dioses,
esta Christian Bale. Por fin, el actor toma el papel protagónico como nunca
antes, después de todo esta es su película, todo empieza y termina con él, como debe
ser, forjando la leyenda de Batman. Por cierto esta vez se moderó con la voz
aguardientosa y es genial.
La película tiene sorpresas, varias y muy buenas que harán las
delicias de los fans (al menos de algunos, ya saben que nunca van a estar todos
contentos), además Christopher Nolan y David Goyer, a pesar de crear un mundo
de Batman realista, han sabido inspirarse de historias de Batman como pocos lo
han logrado, y la cinta está llena de referencias, homenajes o detalles (como
quieran llamarle) a sagas como Cataclismo, No man’s land, La Caída del Murciélago (desde luego), y hasta de la emblemática The Dark Night Returns.
No todo es miel sobre hojuelas, ya comenté lo difícil que es
para esta cinta mantenerse por sí misma porque depende demasiado de nuestro
conocimiento previo; además, al igual que sus predecesoras, la historia está
llena de huecos y trampas, con los personajes sacándose información de la manga para hacer avanzar la
trama y mantener al publico informado; pero lo hacen de forma tan directa y
descarada, que aunque pueda haber una explicación lógica para que sepan lo que
saben, acaba pareciendo que los diálogos vienen de ningún lugar.
Ultimas
consideraciones:
-No faltaran las discusiones entre fans que digan “eso es
Batman” o “ese no es Batman”. Yo mismo he caído en eso, en la anterior al ver
la escena del interrogatorio o aquella donde Batman entra a un club a punta de
madrazos para interrogar a un mafioso, recuerdo haber exclamado: “¡ese no es Batman!”.
Al final de cuentas me parece inútil, con un personaje tan antiguo y con tantas
adaptaciones, cambios y reinicios en sus historietas ya no creo que exista un “Batman
definitivo”, solo las diferentes visiones que de él tengan los distintos autores.
-¿En qué momento Alfred se volvió una enciclopedia de Bane?
Todos hablan de Bane como si su agenda fuera de dominio público. Tal vez si
pensamos en Bane como un Chapo Guzmán o un Osama igual tenga sentido, aun así ¿de
donde rayos se entera Alfred de todo lo que sabe de Bane?
-Y hablando de incoherencias aquí una con tremendo SPOILER
SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER SPOILER ¿Cómo se entera John Blake que Bruce es
Batman? Me parecía que Gordon lo sabía y se lo daba a entender a Blake después de
que este lo saca de las alcantarillas, pero después Gordon se sorprende al
enterarse al final. O sea no entendí.
(ACTUALIZACIÓN: Blake le explica a Bruce que cuando lo conoció en el orfanato, después de tanto idealizarlo como "el huérfano millonario", observó en él ese semblante que solo alguien que ha perdido a su familia puede tener, alguien como el propio Blake. A partir de ahí, Blake reconoció lo mismo en Batman por lo que hizo la asociación. Después de eso, fue cuestión de tocar la puerta en el momento justo y confirmar sospechas. Como dije arriba, puede tener lógica, pero la forma en la que lo presentan lo hace confuso) FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER.
(ACTUALIZACIÓN: Blake le explica a Bruce que cuando lo conoció en el orfanato, después de tanto idealizarlo como "el huérfano millonario", observó en él ese semblante que solo alguien que ha perdido a su familia puede tener, alguien como el propio Blake. A partir de ahí, Blake reconoció lo mismo en Batman por lo que hizo la asociación. Después de eso, fue cuestión de tocar la puerta en el momento justo y confirmar sospechas. Como dije arriba, puede tener lógica, pero la forma en la que lo presentan lo hace confuso) FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER FIN SPOILER.
-La primera
pelea entre Batman y Bane es cruda y salvaje,
todo un choque de titanes. Su segundo y definitivo encuentro… ehhh, pudo ser mejor.
-Es como las secuencias de acción que filma Nolan, son
espectaculares pero no dejan de sentirse algo “frías” y “mecánicas”.
-¿Cuál es la mejor de las tres? ¿esta supera a la segunda? Mmmm
no lo sé, de entrada debo verla de nuevo urgentemente, además creo que el único
juez justo es el tiempo y como dije: con los años el verdadero placer será
echarse un maratón viendo las tres una tarde de sábado.
-Lo que al final hace Batman... creo que muy pocos autores, sino es que ninguno, se han atrevido hacer eso en toda la historia del personaje. Me encantó, y yo lo haria también.